jueves, 27 de julio de 2023
EXCURSIÓN A SOMIEDO
Este nutrido grupo de doce personas, compuesto por exalumnos de Corias, familias y alguna amistad, en el día de ayer miércoles 26 de julio, visitan por la mañana el Centro de Recuperación Forcón en Las Ayelgas de Silviella en Belmonte, Somiedo, y por la tarde la Central Hidráulica de La Malva. Bien conocida es por todos nosotros la cancioncilla aquella que machaconamente repetíamos siendo estudiantes, cuando los padres dominicos nos llevaban en autobuses a visitar lugares fuera del entorno del colegio y cuya letra decía así: “Qué buenos son los padres dominicos, que buenos son que nos llevan de excursión”. Pues ahora, transcurridos casi sesenta años seguimos yendo de excursión y no porque lo organice el colegio, que ya no existe como tal, sino que fue transformado en uno de los mejores paradores del país. Pero esta falta la tenemos perfectamente subsanada, ya que, dentro del grupo hay un organizador de eventos, concretamente es el amigo Samuel, que lo hace muy bien y cuenta con experiencia en estos preparativos pues, no es la primera excursión que organiza de este tipo. El 4 de julio de 2017 visitamos la presa de Grandas de Salime, que fue todo un éxito, ya que, nos gustó a todos muchísimo y nos quedamos con deseos de repetir experiencias de este tipo. En el día de ayer el programa estaba más apretado ya que tuvimos doble visita: por la mañana vimos el museo y por la tarde la central eléctrica. El recorrido que hicimos en el Centro Conservador Forcón, con guía, por las diferentes estancias del museo resultó muy ameno y didáctico, y nos sorprendió gratamente a todos por la calidad y por la gran cantidad de objetos, vehículos, maquinaria y artefactos varios que allí se recogen, bien clasificados y muy bien conservados. De los vehículos impulsados a motor que allí se encuentran, se nos ha dicho que todos funcionan correctamente. La visita resulta muy interesante, tanto por la cantidad de piezas coleccionadas, como por sus características históricas y de funcionamiento. Por lo que es muy recomendable acercarse hasta aquí, para todos aquellos que aún no conozcan este singular museo. Una vez repuestas las fuerzas, seguido de un tiempo de reposo, acometimos la segunda visita a la Central Hidráulica de La Malva. Nada más llegar fuimos recibidos por, Cristina, la guía, la cual durante una hora larga, nos mostró y explicó detalladamente, la historia y funcionamiento de la central generadora de electricidad. Recorrimos sus principales dependencias y a todos nos sorprendió el completo conocimiento que esta persona tiene sobre el edificio y también referente a los datos técnicos de la central. Muy interesante. Seguido visitamos la villa de Pola de Somiedo para degustar en tertulia un refresco y final de la excursión. Todos encantados con lo que vimos y con deseos de que el organizador de eventos siga igual de activo que hasta ahora.
martes, 4 de julio de 2023
... Y VAN DIECIOCHO.
jrFRANCOS
Dieciocho son las veces que un grupo de antiguos compañeros de Corias se juntan anualmente en torno a una mesa y unas viandas.
En esta ocasión me incorporé , que sólo había asistido a tres de ellas. Tenía deseos de volver a ver a los ex y al mismo tiempo comprobar si las canas, arrugas, michelines y envejecimiento en general de ellos y mío habían evolucionado a la par. Los resultados de la comparativa, por eso de la "protección de datos", vamos a dejarlo en asunto reservado.
Fue una comida de hermandad grata, con buen yantar, si exceptuamos, para mi gusto, la ternera, que parecía que estaba todavía dando brincos por el prado. Excelentes los postres. Y un precio por cabeza en buena relación con lo comida (36 Euros), si no contamos los chupitos, que no tuvieron la gentileza de invitarnos y que lo hizo Pipo.
Mal, y así lo hice constar en una encuesta que nos pasaron al final, los asientos de lamas de madera que se te clavaban en los glúteos y te hacían un traje, en esa parte, listo para ingresar en Topas (prisión de Salamanca). Propio del sótano de interrogatorios de la inquisicón el respaldo. Como decía Samuel, "eso es para que cuando dejemos de estar encorvados, comiendo, nos vayamos y la mesa quede libre". Haré lo posible por asistir a la décimo novena edición.. No es que seamos todos amigos y que con cada uno de ellos te irías a una isla desierta a pasar un fin de semana, pero sí tenemos la capacidad de estar tres horas juntos, hablando en buena armonía y convivencia, convengamos que eso también tiene su dosis de amistad.
La foto que precede, corresponde a la primera reunión que habían celebrado en Oviedo allá por setiembre de 2007.
Hasta otra.
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