En el comentario último de Ulpiano en la entrada anterior, recuerda las flores amarillas que
anuncian la primavera y que suelen abundar por los prados del occidente asturiano,
entre otros muchos de la zona norte. Pues bien, esas bonitas plantas de olorosas
flores con pétalos de color amarillo suave y hojas de color verde fuerte, llamadas
Prímulas, suelen anunciar la primavera, de ahí su nombre, con su presencia en los prados situados en
laderas que dispongan de agua abundante,
como pasa por buena parte del concejo cangués. Sé que estas plantas, a poder
ser, sienten predilección por los suelos
calcáreos, pero también se acomodan y vegetan estupendamente sobre terrenos de
composición silícea como es el caso de la mayoría de los terrenos que conforman
el suroeste asturiano. Conviene puntualizar que esta planta, aparte de su nombre científico
que es Prímula, al menos en la zona de Cangas
a sus bonitas flores, popularmente, se las conoce más como “flores de San José”, que como Prímulas.
Y es simplemente porque hacen su aparición por la festividad de San José,
aproximadamente, en vísperas de la entrada de la primavera. A mí siempre me
han llamado mucho la atención estas
flores, ya desde niño; y aún ahora, cada vez que las veo me producen una grata
sensación. Precisamente, el otro día estando en Xedré y aprovechando que
estaban la cuneta y parte de la ladera de la carretera cuajadas de estas delicadas flores, hice un montón
de fotos como la que encabeza este texto y que pongo aquí para que Ulpiano no las eche de menos.
En mi caso, es una
reminiscencia muy agradable que mantengo del colorido que tomaban los prados de
nuestros pueblos, año tras año, como anuncio de la llegada de la primavera.
B. G. G. Blogero “Prior”
12 comentarios:
Clase Magistral del Prior sobre Botánica. No se puede explicar mejor en tan poco.
En la Capital de la Costa Verde a estas horas luce un expléndido sol y parece, por lo despejado del cielo que al menos durará todo el día, que ya va siendo hora porque la Primavera ya asoma por la esquina.
Muchas gracias Alfredo, pero esto es lo mínimo que se puede esperar de un bachiller que cursó la modalidad de agrícola y ganadera en el Instituto Laboral San Juan Bautista de Corias, hoy reconvertido en flamante Parador Nacional y que está a punto de ser inaugurado en cualquier momento, según reciente información de la Red de Paradores Nacionales.
Animado por los piropos de Alfredo, voy a añadir otra cosa. Esto que he puntualizado en la entrada sobre la preferencia de algunas plantas por determinadas clases de terrenos, bien de naturaleza calcárea o silícea, aunque pueda parecer una pedantería innecesaria por mi parte, no lo es, pues es una característica que utilizamos mucho la gente que hemos trabajado en Geología cuando hacemos cartografía geológica sobre terrenos que no tenemos referencias litológicas y que no existen afloramientos en superficie del substrato rocoso. Una buena orientación para aproximarse al tipo de roca que subyace bajo los recubrimientos de suelos de origen vegetal, coluvial o aluvial, es por el tipo de vegetación que vemos encima. Hay plantas que solamente se desarrollan debidamente en terrenos de constitución calcárea. La cuestión está en saber cuáles son estas plantas. Pero tampoco esto es una regla exacta pues, existen plantas que aún prefiriendo materiales de composición básica, cuando están sobre otros de naturaleza ácida, se aclimatan perfectamente porque se conforman con la aportación que les hacen las aguas que han pasado sobre calizas a lo largo de algún tramo de su recorrido y que transportan cantidades importantes de carbonatos. Como todo en la vida, no hay nada exacto, pero en general, esta observación supone un buen indicio para poder intuir lo que tenemos debajo de nuestros pies sin necesidad de tener que investigar en profundidad con sondeos. Espero que os haya gustado esta pequeña observación. Y si es así, para otro día más.
Ya estamos en el tiempo
de inmersión primaveral,
y aunque lo digo con tiento
pues Murphy al acecho está,
pláceme de bienestar .
*****
Por congratularme ya,
a Maribel y a Galán
a Gión y a los demás,
con querencia les diré:
sois para mí entrañables,
en mi santo, San José.
*****
Si algo hay que alabar
en un prójimo cabal,
es el sentido de humor,
ser grácil de adaptación,
y de cintura juncal
disponer para fintar.
De esto goza el Prior,
y si el trance oscurece
da apertura en el Blog
a flor y horizonte verde.
Con oportunidad, y precisión de fecha, Benjamín, nos trae, enredada en las flores de la fotografía, la anhelada primavera.
En realidad, a través de esas flores, desvela recuerdos de muchas cosas más:
El final del invierno, cuando, aquellos años, los prados aún cubiertos de nieve comenzaban a liberarse de ella y en un rodal, conquistado por el agua de cristal, aparecían ya, como por milagro, esas frágiles y curtidas flores.
La proximidad de las vacaciones de Semana Santa, sin obligación, por unos ansiados días, de acudir al instituto, y la ilusión de quedar sólo un trimestre para romper el espinazo al tedioso curso.
La cercanía de la “Bolla” de Pascua, esperando que los padrinos algo bueno regalaran.
La primera feria, la de Ramos, cuando todo el Concejo resucitaba del largo letargo invernal, también las batallas con los ramos de laurel, antes y después de su bendición, o la fartura de huevos para desayunar el día de Pascua, ese día no había límite, se podían comer todos y de todas formas hasta casi reventar, era la tradición, al menos en la casa de Limés
La primera fiesta de primavera, en Las Mestas, con Marino, chaqueta celeste, cantado con La Nopal.
Sin olvidar ese nido temprano construido por un pájaro asustadizo, traicionado por las hojas de la rama sobre la que delicadamente lo había construido y que no acababan de desplegar… tantos recuerdos, tenemos todos, engarzados en esas primorosas flores…
Bueno, con retraso me uno a las felicitaciones de los José. Siento el retraso pero estos días estoy con poco tiempo; el imprescindible para leeros. En relación a los santos, los que tenéis nombre compuesto ¿os apuntáis a los dos?, porque si es así tenéis mucha cara. Unos tanto y otros tan poco. Yo estuve durante mas de cuarenta años sin saber cuando era mi santo, a pesar de que mi padre buscó por todos los santorales y no lo encontró. Un buen día estando en el Corte Ingles de La Coruña, al pagarle a la cajera, ella también se llamaba Olga y me dijo ¿ a que no sabes cuando es tu santo?. Sorprendida le dije que no. Es el día 10 de Julio me dijo. Se ve que a ella también le habia costado encontrarlo e imformaba a todas sus tocallas en cuanto tenía la posibilidad. Después de un tiempo, estando trabajando en la pastelería un cliente me lo comfirmó, pues el tenía una hermana con el mismo nombre, pero ya estaba yo tan acostumbrada a no tenerlo que se me pasa el día y ni me acuerdo.
Galán, preciosas las flores. En mi jardin están floreciendo los lirios. Este año mucho mas frondosos que el pasado.
Benjamín, vengo observando, que además de otras muchas y buenas cosas, eres un gran fotógrafo. Además la naturaleza te debe de gustar especialmente. Recuerdo una fotografía con unos racimos de uvas que hiciste el día de la comida de ADEACO, que está puesta en el Blog, que es buenísima. Esta de las flores de San José, también está muy bien.
Yo recuerdo esas flores de cuando iba a los prados con una tía. Así a principios de año, yo creo que las primeras eran unas que llamábamos de “San Joaquín” una especie de margaritas silvestres pequeñas. No sé si vosotros las llamareis así. Después las violetas, en febrero. Y por esta época también, otras que llamábamos “Flores del diablo”, que son amarillo fuerte y son parecidas a dalias o crisantemos, también silvestres. Precisamente hoy cuando venía de trabajar, venía fijándome, por la zona donde vive Mamen, y había los tres tipos: San José, San Joaquín, y el diablo. Violetas, no sé si había, yo no las vi, porque miraba desde la acera, y sin gafas… Al ser oscuras son más difíciles de distinguir.
Menuda tesis doctoral que nos pone ahi el Prior, sobre las Prímulas,conocidas como Flores de San Jose,te digo un sitio que esta siempre lleno de ellas es el prao del Cuco,al principio de la carretera nueva, llenito,ese prao siempre esta lleno de ellas y bien dice Benjamin,es un lugar sombrio y con un buen regueiro que por alli baja,siempre esta con humedad, ademas yo las tengo localizadas,pues en esta epoca como en la terraza tengo pocas flores,pues las cogemos y luego las planto en tiestos y aun me duran un tiempo,vamos preparados con picon y todo para arrancarlas con la raiz,aunque estos dias tengo el camelio, guapisimo de camelias rosas,
Las margaritas a las que hace mención Maribel y que son parecidas a la manzanilla, también se les llama margaritinas. Las otras, de color amarillo, supongo que es el diente de león, muy solicitado por los jilgueros, en esta época.
Como la época coincide con el equinoccio, existe un refrán sobre este tiempo de finales de invierno y principio de primavera:
Piescos floridos
piescos maduros
noches y días
todos son unos.
Buen viaje al japonés.
Samuel, efectivamente las flores amarillas, que a mí me enseñaron como “flores del diablo”, es el diente de león. Miré las imágenes de diente de león y son las que yo digo, y que estos días abundan mucho, al menos por esta zona.
No sé si será por la alergia al polen que tengo, pero las flores y los campos no me atraen mucho. Me dijeron esos nombres cuando era pequeña y no me preocupé de saber más. Probablemente en algún momento lo supiera, pues lo de diente de león me suena. La primavera me gusta, pero me sienta muy mal, así que la mayoría del tiempo, sobre todo mayo y junio, tengo que salir lo menos posible y al campo nada.
Ese refrán que pones de “piescos floridos, piescos maduros…” yo no lo había oído nunca, pero efectivamente florecen en el equinoccio de primavera y maduran en el de otoño. Todos los días se aprende algo.
Maribel, ya veo que Samuel te ha aclarado la duda de las flores. Efectivamente, las flores amarillas son el Diente de León y en cuanto a las de San Joaquín, pequeñas margaritas, no sé yo por qué se les denominará así ahí en Cangas, pues la festividad de este santo, junto con el de su esposa Santa Ana, como padres de la Virgen, se celebra el 26 de julio. Lo que sí sé, es que en otros países, sobre todo en Sudamérica, se le llama flor de San Joaquín al hibiscus, que es una flor muy bonita grande, de forma acampanada, propia de lugares cálidos con clima influenciado por el mar. Yo las he visto de varios colores: granate, amarillo, fucsia y blanca. Popularmente, también se le conoce a esta flor según variedades como: Rosa de China, Rosa de Siria…
Es una flor muy vistosa y aparente cuya planta llega a alcanzar tamaño de arbusto. En los parterres y jardines mediterráneos, de Murcia y Almería, se pueden ver estas espléndidas flores durante todo el verano.
El "diente de león" es una planta medicinal que se utiliza para: colesterol, diurético,cálculos renales, depurativo de sangre, etc.
Demasiadas propiedades para una planta. Valdrá más no probar.
La otra, tipo margarita o margaritina, se llama "chirivita".
Mal lo tienen los alérgicos al polen por esta fecha, aunque no es esta la región más peligrosa.
Seguramente que el llantén y las coníferas son las que debemos tener en cuenta en estas latitudes.
HAXA SALÚ.
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