Texto y fotos: jrFRANCOS
DEDICADO a Mamen, que en febrero viajó a la zona costera de Huelva y no nos contó nada de aquellas vacaciones.
Se conoce como "La Raya " a esa frontera existente entre España y Portugal, durante siglos cambiante según el acero y la fuerza de la espada, y que después de la Convención de Badajoz en 1267, consolidada por el Tratado de Alcañices, en 1297, los reinos de Castilla y Portugal fijan que en la provincia de Badajoz (y también en Huelva) la frontera quedaría delimitada por el río Guadiana.
En menos de una hora llegamos a Badajoz, donde en un bar desayunamos una tostada de pan con aceite y tomate, adornada con unas virutas de jamón ibérico. Café con leche y un zumo de naranja recién hecho. Tres euros con cincuenta céntimos.
Visitamos el museo del carnaval, abierto hará como un par de años en un fuerte de la muralla Vauban, en zona céntrica, por ser lo que nos queda por conocer de esta población, de quien se dice que es la última ciudad portuguesa en España y la primera ciudad española en Portugal, dada su proximidad y flujo comercial y de visitas recíprocas. (Los portugueses vienen a hacer compras y a echar gasolina, aquí más barata, y los españoles vamos allí también de compras, a comer y por turismo).
En unos pocos minutos recorremos los ocho kilómetros que nos separan de Elvas, la tercera ciudad más importante del distrito de Portoalegre, en la región del Alentejo (lejos del Tejo, del Tajo), que cuenta con 28.279 habitantes.
Elvas tiene mucho que ver: siete bastiones, dos fortalezas, una catedral del gótico tardío, con reminiscencias moriscas, un acueducto y seis museos. Nosotros visitamos el de Arte Contemporáneo y el de Fotografía. Y atracción que sentimos por el agua, nos acercamos a ver su imponente Acueducto de Amoreiras, que se tardó ciento veinticuatro años en construir (1498-1622), el cual abastecía de agua a la ciudad y que alcanza en algunos puntos alturas de hasta 40 metros.
Frente a la catedral, la Plaza de la República es un inmenso mosaico de piedras encajadas formando dibujos artísticos que acreditan la bien ganada fama que los portugueses tienen como canteros y en el manejo de la piedra en general. Un letrero de cerámica en la fachada de un comercio atrae nuestra atención. Anuncia ginja, un licor de guindas exquisito que fabrican en Óbidos (población del interior que estuvo de actualidad en el pasado reciente, pues hacia allí se dirigía aquella furgoneta de ETA cargada de explosivos que interceptó la guardia civil en Zamora). Entramos y la dueña, sabiendo que por la boca muere el pez, nos la da a probar. Humm.... Compramos una botella, quince euros (nos dice que en las grandes superficies la venden más barata, pero que ésta es de fabricación artesanal).
Después de comprar unas toallas y dos anillos de plata en una tienda de empeños, con certificado de que es auténtica, son de segunda mano y están esterilizados, como están al caer las dos de la tarde, nos encaminamos hacia Jurumenha, a dieciocho kilómetros. Cuando nos dirigimos al único bar de esta pequeña freguesia (feligresía, también parroquia o pedanía), de 146 habitantes, una mezcla de bar de pueblo y de restaurante modesto, los últimos comensales están tomando café. Caemos entonces en la cuenta de que en Portugal van con una hora de adelanto y que son las tres y pico. Aún así, nos atienden y comemos opíparamente: arroz caldoso con marisco de primero, bacalao dorado de segundo, vino, pan (¡qué pao más bueno hacen en Portugal!) y flan casero. De entradilla nos habían puesto unas cervezas con aceitoas y unas tarrinas dequeijo para untar, mientras ojeamos OJornal. Total, quince euros por cabeza.
Para ayudar a hacer la digestión, damos un paseo por la población, donde llaman nuestra atención las chimeneas cilíndricas, como si fuesen jaulas, y el azul vivo de los zócalos de las casas. Son dos señas de identidad de la arquitectura rural lusa.
Nos acercamos luego a la fortaleza, quien sobre una barranca llega al río como centinela secular del Guadiana, Guadiana que aquí está represado por el gran lago de la presa de Alqueva, la segunda por capacidad de Europa, a medio centenar de kilómetros, en el corazón de Portugal. De ella salían o en ella se refugiaban las tropas portuguesas en sus sempiternas razzias fronterizas con las del Reino de Castilla. Al otro lado se divisa la comarca de los Llanos de Olivenza. Estas tierras, hasta la firma del mencionado Tratado de Alcañices, eran un continuo campo de batalla entre españoles y portugueses. Tanto es así, que del lado español hay una población que se llama San Benito de la Contienda.
Al atardecer, regresamos. Pero no lo hacemos por Badajoz, sino que cruzamos el Guadiana por Ayuda. Allí está, con sus arcos centrales volados durante la Guerra de Sucesión en 1709 el emblemático puente de Nossa Senhora da Ajuda, cuya construcción iniciara el rey portugués Don Pedro I en 1363; uno, paralelo al anterior y de moderna factura, nos lleva casi en línea recta a Olivenza. Olivenza tiene mucho que ver, pero nos limitamos a tomar un cafelito con técula-mécula, el dulce típico del lugar, y continuamos viaje de regreso hacia casa.
El total 180 km. y 175 euros, gasolina, compras y comida incluida; tres personas. "En Extremadura se vive bien", me decía un día el padre de Tamsin, una niña inglesa que tuve como alumna y que se había venido a vivir aquí con toda su familia. "Y en el Alentejo también", apostillaría yo.
1 comentario:
Es verdad que no os conte nada de mi viaje a Isla Canela,pero mira acabo de regresar de Ibiza. De Huelva capital ya habia estado alli, en Isla Canela me toco el frio tan espantoso que hubo aqui en el mes de Febrero y alli sol todos los dias,la temperatura 14 0 15 grados por el dia, por la noche bajaba bastante a 1º algun dia que me decian en el hotel que no era habitual en ese tiempo esa temperatura, pero comparada con la de Cangas que me decia mi hija ,era una maravilla, yo incluso metia los pies en el agua ,la verdad es que estaba fria ,pero los de Cangas estamos curtidos,hasta me hice amiga de unos pescadores que pescaban "coquinas" creo que se llamaban, son como almejas chiquitinas,y creo que son caras me decia que en Madrid podrian estar a 25 euros,llevaban como una especie de red que arrastraban en las orillas,con unos palos que parecian que llevaban ruedas por lo aprisa que caminaban,luego cuando salian con la red bastante llena me decian que no siempre era ai,las pasaban como una especie de tamiz,primero mas pequeño, para que saliera la arena, luego un poco mas grande para que salieran las cascaras que venia vacias,luego ya se quedaban las que estaban bien,las echaba en un bote y luego para un cubo,le pregunte porque lo hacia asi, me dijo que era la medida de un kilo el bote,pues saco en poco tiempo 5 kilos, le pregunte a como se las pagaban sobre 10 euros, me dijo que si eran de Doñana las pagaban mas.Ibamos a menudo a Ayamonte pues nos cogia el Autobus delante del hotel, algunos dias pasabamos en el barco a Portugal que eran 5mtos. otros dias nos quedabamos en Ayamonte a comer, que tengo que decir que las gambas de Huelva, tienen fama pero de verdad que estan buenisimas, tiene un sabor especial,tambien fuí al Rocio que me decepciono bastante, crei que era otra cosa, comimos bien eso si y luego alli bailamos con un coro rociero que cantaba estupendamente y lo pasamos bien ;tambien fuimos al Algarve, zona turistica de Portugal se notaba, por los yates atracados en Vilamoura y Faro, tanta fama que tiene el bacalao, que no es por nada, pero hago yo un bacalao a la portuguesa que ya lo quisieran hacer alli y asi pasamos los dias, es una zona de marismas y aparte de los hoteles, urbanizaciones a lo bestia, alli debe de haber por el verano extranjeros a monton, pues todos los dias ibamos a un pueblo que estaba cerca del hotel andando que se llamaba Punta del Real, y todo lo que eran restaurantesy demas hosteleria estaba todo cerrado era un pueblo pequeño de pescadores, que supongo que los meses de verano estara a tope. Fuimos a visitar la catedral de Faro, en Portugal me llamo la atencion, porque por alli debieron de pasar los dominicos,pues ya tienes que pasar para ir alli, por una puerta que esta en los restos de una muralla, que se llama la Puerta de Sto.Tomas de Aquino y luego en la Catedral, hay un altar dedicado a San Alberto Magno otro a Snto. Domingo de Guzman, otro a la Virgen del Rosario, con estos precedentes por alli fijo que hubo paso de dominicos, tiene un campanario que tiene una vista muy bonita que ves todo Faro desde alli y luego hay una capilla que le llaman de los huesos, que es lo que hay restos humanos a cientos ,todos muy colocaditos,creo que sus propietaros nunca pensarian que iban a ser tan comtemplados,tambien en Vilamoura fuimos a tomar algo a un Restaurante propiedad de Figo, pensamos que nos iban a clavar pero no,bastante normal,tambien es un pueblo que debe de ir gente muy pobre ,porque los casa que veias, como decimos en Cangas eran de "espatarrar" unas chocinas de nada,y los yates que habia en el puerto ya ni te cuento.Ya no os meto mas rollo otro dia, os cuento lo de Ibiza que el tiempo buenisimo todo el dia piscina y playa, aqui con la calefaccion que le vamos hacer. Saludos y en especial a Benjamin que esta pasando por un momento especial.
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