martes, 3 de diciembre de 2013
LOS SUIZOS ADORAN A SUS JEFES... ¿También los españoles?
Solo hago la pregunta, la afirmación es titular de portada
en un periódico helvético. Un titular basado en una encuesta realizada en
distintos países europeos, no incluye a España. Siento curiosidad por saber
cual hubiese sido la respuesta en nuestro país.
Esa encuesta dice que un 80% de los suizos están muy
satisfechos de sus jefes y puede explicar el resultado de un llamativo
referéndum celebrado la pasada semana.
En Suiza casi todo se
decide por referéndums, hacen varios a lo largo de cada año sobre todo tipo de
temas que reglan la convivencia: horarios de centros comerciales, regulación de
la caza, edificación en determinados lugares, leyes sobre inmigración,
pertenencia, o no, a las distintas organizaciones internacionales etc.
etc…hasta la subida de la viñeta del peaje en las autopistas, propuesta
recientemente rechazada, es sometida a consulta.
El referéndum al que me refiero es el llamado 1:12, una
propuesta que pretendía que ningún ejecutivo de una empresa ganase en un mes
más de lo que gana en un año el trabajador de esa empresa con el salario más
bajo. Es conocido que en algunas multinacionales radicadas en Suiza el sueldo
diario de algunos altos cargos equivale al que perciben trabajadores de esa
empresa durante todo el año. Circunstancia a la que no son ajenas empresas del
resto de países, incluido el nuestro.
Sorprendentemente, al menos para mí, la propuesta fue
rechazada por un 60% de electores. Los partidarios del sí recolectaron algo más
del 30%.
Un resultado que da la razón a la encuesta y al titular del
periódico. Choca viniendo de un país del sur, acostumbrados a ser, tantas
veces, esquilmados por empresarios sin escrúpulos o por sus brazos ejecutores.
No es que en este
país no haya diferencias sociales, que las hay, y muy acusadas teniendo en
cuenta los datos anteriores, pero tengo la impresión, por aquello que conozco,
que un trabajador de este país con sueldo bajo goza de una situación de
bienestar, capacidad de compra, superior al de uno en España con sueldo medio.
Ahora está en marcha otra iniciativa, parece ser que será
sometida a referéndum la próxima primavera, para fijar el salario mínimo,
actualmente no existe, en 4.000 Fs (más de 3.000 €/mes). El paro supera
ligeramente el 3%
No quiero entrar en comparaciones, las diferencias son
antiguas y tienen hondas raíces, tampoco decir que Suiza sea un paraíso para
los trabajadores, ese paraíso no existe, pero es imposible dejar de pensar en
la situación de nuestro país; donde, el gobierno,- irá subiendo el amplificador
a medida que se vayan acercando las elecciones- dice que nos está sacando de la
crisis. Aunque la cola del paro no disminuya, por mucho malabarismo estadístico
que se haga, y el Fondo de Reserva para las Pensiones continúe volatilizándose,
puede que tenga algo de razón. Pero, ¿a quién está sacando de la crisis? Es
cierto que en el último periodo se están incrementando, a buen ritmo, las
fortunas multimillonarias en España, lo publican todas las revistas económicas
especializadas en hacer listados de ricos. También los bancos, los primeros
responsables de la crisis actual, la avaricia rompió el saco, están engordando
de nuevo gracias a las ayudas recibidas, dinero de todos, y con un escandaloso
negocio, propiciado y tolerado por los poderes políticos, al obtener ingentes
sumas, préstamos del BCE al 0,25%, y colocarlas en bonos de deuda pública
española, la que tenemos que pagar entre todos, al 4,1%( no lo digo yo, son
expertos economistas quienes dicen y publican) Teniendo ese opíparo negocio
¿Cómo van dar crédito a las pequeñas y medianas empresas, las principales
generadoras de puestos de trabajo? Obvio es decirlo, la responsabilidad no es
de los bancos, están a lo suyo, rapiñar dinero, es del poder político que
legisla y alienta esta situación. ¿Luís Candelas al revés?
Hoy mismo, en un estudio realizado por una organización
alemana, publicado también por medios españoles, se asegura que España es el
segundo país del mundo donde más ha incrementado la corrupción.
.
Empecé con una curiosidad suiza para acabar un tanto
indignado en España. El motivo tal vez se deba a que el mismo periódico que
publicaba la encuesta, la que refería al principio, hace pocos días también
informaba del fuerte incremento en el número españoles - superando ya a los
provenientes de otros tradicionales países- recién llegados a Suiza huyendo de
la precariedad económica y del paro atendidos por sus servicios sociales.
Alguno dirá; qué
tiene que ver todo esto con el epígrafe del blog: “Recuerdos del Instituto
Laboral San Juan Bautista de Corias”, y tal vez tenga razón. Pero sería olvidar
que, en Corias, algunos profesores, quizá sobre el plural, además de Física o
Matemáticas, nos hablaban de Justicia Social.
Ulpiano Rodríguez
Calvo
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10 comentarios:
Que los trabajadores, aquí en nuestro país, le tengan cierto amor al jefe, yo creo que eso debe de ser una cualidad que no va implícita en el código genético de los españoles. Eso parece más bien una característica propia de ciudadanos suizos y de otras gentes de países similares, con un bienestar social y una cultura cívica muy altos, porque el español de por sí es envidioso y no es dado a filias, sino a fobias. El españolito es más proclive al derribo que al encumbre de sus superiores. El jefe que en nuestro país se crea que goza de cierto afecto o agradecimiento por parte de sus trabajadores, salvo las raras excepciones que pueda haber por parte de los enchufados y arrastrados que le estén en deuda, está muy equivocado, y si así lo piensa, solo demuestra ser un iluso que conoce muy poco a su personal.
Para confirmar esto que digo solo bastaría con poner la oreja en las múltiples tertulias que se celebran a diario en los corrillos de los lugares de trabajo durante los ratos de descanso de la jornada, bien para tomar el bocadillo o la comida. La conversación unánime que predominaría en todos los grupos sería la de poner la jefe de hijo de puta para arriba a cada instante. Y lo malo de todo esto es que, en una gran mayoría de casos, estarían haciendo lo propio y con toda la razón.
Esta temporada ando un poco retrasada en los comentarios del Blog. Iba a comentar, y lo voy a hacer en este momento, la entrada de Ulpiano sobre los suizos y sus jefes, y ya hay otra que dejaré para mañana.
Bueno, pues en relación con esa entrada, quiero decir que yo nunca tuve problemas con mis jefes/as, y a tanto como a adorar no llegué, pero sí a reconocer su valía. Desde que estoy en la Administración, tuve dos jefes y dos jefas. Todos me parecieron personas que desempeñaban muy bien sus puestos en todos los aspectos. Eso sí, no quiero dejar de destacar que con el que tuve desde principios de 2002 hasta septiembre de 2012, en que por reestructuración del organismo en que trabajábamos pasamos a distintos centros, tuve y tengo un aprecio especial, para mí es como familia allegada, y me consta que es mutuo. Si todavía fuera mi jefe no lo diría aquí porque podía parecer que lo hacía con algún fin. Resumiendo, que debo de tener algo de “suiza”.
Parece que el frío intenso
hace mella en el bloguero,
contrayendo tanto el cuerpo
como el numen y el cerebro.
**********
Abundo en lo mentado
por los bloggers de postín,
Maribel y Ulpiano
y el gran Prior Benjamín.
Sobre el nivel de amor
entre el jefe y su inferior,
no es posible “comparanza”
entre Suiza y España,
pues no tienen parangón.
Si acaso y por ascendencia
quizás con Grecia e Italia,
con Portugal y con Francia,
pues como es conocido
nuestro país y vecinos
no son credo calvinista
y sí es queridos amigos
la riquísima Suiza.
Debe de ser el frío lo que nos tiene un poco contraídos como dice J.Manuél en su bien traído verso, pero esta entrada de Ulpiano aunque en principio no tenga nada que ver con Corias tiene que hacernos pensar. ¿Por qué habrá tanta diferencia en la manera de comportarse entre los habitantes de diferentes paises?. A veces pienso que hay mucho sentido común en el general de las personas, pero que en los políticos es algo que está muy mermado y me resulta dificil de entender. No sabía yo que en Suiza se consultaba y se reglaba la mayoría de las normativas a base de referendums. Eso aquí es impensable. Bueno, los catalanes quieren hacer uno y no los dejamos, claro que en este momento creo que ni ellos mismos saben lo que quieren. En fin, dicen que cada pueblo tiene lo que se merece, pero creo que nosotros no nos lo merecemos.
La semana pasada estuve en Cangas y hace allí un frío...que no recordaba. Debe ser que me estoy haciendo mayor.
Tiene razón, como siempre, o como siempre en este blog, el certero versista nacido en Rañeces y allegado a San Lorenzo: parece que estamos algo xelaos.
Más bien estábamos; Olga y Gión, ayer y hoy, ya han rasgado ese invisible velo que algunos días, al cubrir ausencias, puede parecer frío.
Por aquí llevamos más de una semana envueltos por una niebla que se puede cortar con cuchillo. Hasta los termómetros parecen congelados; en cualquier hora del día o de la noche no oscilan más allá del +1º al -1º. Solo alguna noche, al retirarse las nubes dando paso a las estrellas, cuando amanecen parques y tejados pintados de blanca escarcha, bajan a -5º. Curioso, en las montañas del entorno, a más de dos mil metros de altitud, luce el sol a diario, y en las horas centrales del día se alcanzan hasta 8º positivos.
José Manuel cita en sus versos al calvinismo y demuestra conocer a éstas gentes. La Reforma no se limitó a eliminar ornamentos y suntuosidades en iglesias y catedrales; arraigó profundamente, para lo bueno y lo malo, en las costumbres y el carácter de sus seguidores. Toda su forma de vida, prácticamente, es un poco el reflejo de la austeridad de sus templos. Sólo un ejemplo: los trenes. En este país existe una red ferroviaria envidiable, eficaz, pero no lujosa. Nada de alta velocidad a 300 Km. /hora y vagones ostentosos. En general los trenes son funcionales, comodidad la justa, pero permiten viajar en cuatro horas a cualquier ciudad situada a 400 Km.y con una frecuencia, entre las principales ciudades, de dos trenes a la hora durante todo el día. Por no hablar de la estupenda red de cercanías y del transporte urbano.
Tengo la impresión, por lo que puedo observar, que la mayoría de coches lujosos, esos que cuestan cientos de miles, así como el resto de lujos que se exhiben, son, generalmente comprados y lucidos, haciendo ostentación de ellos, por quienes proceden de fuera, predominando los árabes.
Al viajar por este país llaman la atención los bosques limpios y cuidados, con la leña destinada al consumo doméstico cuidadosamente apilada; también, en una zona que tiene muchas menos horas de sol que el sur de Europa, ver los tejados de numerosas naves industriales, y viviendas, cubiertas por placas solares. Se ve que conocen bien lo que vale el peine energético. Sobre todo si está generado por gas, petróleo o nuclear.
Los servicios sociales, por lo que me han contado, afortunadamente aún no he tenido que recurrir a ellos, atienden con eficacia a los acogidos en este país que no disponen de medios de subsistencia. Sin embargo, tengo la impresión, no es este un buen lugar para la mendicidad, y no solo por estar prohibida. El otro día, por el desajuste horario en una cita, permanecí más de media hora en las proximidades de un semáforo que regula una de las salidas de la ciudad. Allí, un hombre, se afanaba tendiendo la mano, haciendo aspavientos dirigidos al cielo, implorando una limosna a los vehículos que la luz roja obligaba a detenerse. Durante todo ese tiempo ninguno de los ocupantes de los centenares de coches a los que se dirigió hizo la mínima intención de bajar el cristal de la ventanilla. La única atención que le prestaron fueron unas pocas, casi imperceptibles, negativas con la cabeza. Ante el éxito el mendigo abandonó el lugar antes de marcharme yo. Tal vez por aquí tienen claro que una cosa es la solidaridad, y otra, distinta, la caridad.
A Olga le llama la atención el sistema de referéndums utilizado por los suizos para tomar decisiones. Precisamente la prensa de hoy anuncia la convocatoria de otro, a realizar el próximo año, sobre las tarifas del transporte urbano
Olga, tienes razón en Cangas estos días hizo muchísimo frío. Hoy a partir de mediodía ya cambió y se agradece. Ayer por la tarde fuimos a Oviedo y desde la presa del embalse de La Barca hasta Oviedo era otra cosa. Cuando veníamos, a las once de la noche, allí junto a la presa había siete grados y en Cangas uno bajo cero. Se ve que venía cambiando por el norte, porque los días anteriores también hizo frío allí, pero no tanto.
Hace unos días vi en el contador del blog, alguien de Suiza, y pensé en Ulpiano y miré la temperatura de Ginebra, que estaba más alta que aquí. Aunque ahora leyéndolo a él, veo que la información no era buena, pues daban por la noche uno bajo cero y por el día cinco o seis. Aquí por la noche llegó a haber cinco bajo cero dos o tres días.
Habla Ulpiano de la leña para uso doméstico cuidadosamente apilada. A mí fue una de las cosas que más me llamó la atención allá por 1989. Me recordaban los paquetes de galletas tostadas rectangulares. Ahora ya se va viendo la leña por aquí así colocada, pero en pocos sitios, probablemente sea consecuencia de las estancias allí de la gente de por aquí. También de los viajes. Además por aquellos años aquí cualquiera construía en un terreno –prado, huerta o lo que fuera- un chamizo cubierto de Uralita y sin ningún cuidado –con una puerta vieja que no ajustaba, etc.- para guardar los aperos, daba muy mala impresión. También creo que ahora aquí eso está cambiando y ya no deben de dejar construir así. Todavía quedan restos o algunas de aquellas cabañas antiguas bien construidas de piedra y con teja que da gusto verlas.
José Manuel, esta temporada te prodigas poco, pero certero en las observaciones.
Gión con su buen humor de siempre. También con sus celebraciones. Esta vez no se nos despidió con ninguna canción.
Ulpiano, sabes perfectamente que si aquí se celebraran todas esas consultas estaríamos cambiando de gobierno al compás de cada referéndum.
Nuestra sangre tiene otra temperatura y eso se nota en todos los aspectos.
Lo que está ocurriendo en todos los organismos: Tribunal Constitucional, CGPJ,Fiscal General y un largo etc. nos da una idea del abismo que nos separa de esa cultura que mencionas.
No te olvides que no sólo la banca está sacando tajada de nuestra prolongada crisis; otros paises, como Alemania, además de exprimirnos el jugo, están sacando buen beneficio de nuestras miserias. Estamos viendo cómo personajes, importantes de la vida política, involucrados en corrupción, salen de rositas porque sus juicios se alargan tanto que prescriben. No sé si prescriben porque se alargan, o se alargan para que presciban.
El pez grande se come al chico y camarón que se duerme...
Samuel estoy muy de acuerdo con tú comentario,salvo en lo de los camarones....por su precio,ni la corriente...Ulpiano olvida comentar que la gran cantidad de gallegos y asturianos emigrados a Suiza,en cuanto pueden,regresan,no ven ese paraiso del que habla Ulpiano.El arraigo es nulo,alguna vez, de la segunda o tercera generación,aparece algún concejal con apellido hispano,que la prensa gallega airea.Le emigración está prácticamente cerrada.Un emigrante tiene casi imposible abrir un negocio.La sanidad pública en la práctica no existe.Solo hay que ver Españoles por el mundo y se vé lo que vale una consulta médica.Mi hermano por los años 80,ganaba 4.000 francos mensuales,operario cualificado,estudió en el instituto de Corias,claro que tenía que trabajar 16 horas diarias de lunes a sábado.Las compra la hacía cruzando la frontera con Alemania,más barata.
Estos días he leido que una botella de albariño cuesta en algún lugar de Suiza 35 euros.Mi consuegro,con sus dos hijos nacidos en Suiza y por lo que dice,
con buen salario,abandonó el paraiso suizo y está feliz en La Coruña,igual que mi hermano, en Asturias.
Claro que tampoco debemos olvidar,moralmente,de donde proceden los dineros depositados en los bancos suizos....dictadores,dictadores sanguinarios,narcotraficantes y toda clase de delicuentes,políticos corructos,blanqueos de dineros y toda clase de argucias.Lo de Bárcenas,solo es un grano, en un granero.
La historia de la transparencia bancaria suiza,no deja de ser literatura....Nos iremos al cementerio y ese paraiso fiscal y otros muchos...seguirán presentes.
Como anécdota puedo decir,que aquí en La Coruña entran al año unos 150 cruceros....todos están abanderados en paraisos fiscales y son bien recibidos en cualquier puerto que atraquen.
Samuel estoy muy de acuerdo con tú comentario,salvo en lo de los camarones....por su precio,ni la corriente...Ulpiano olvida comentar que la gran cantidad de gallegos y asturianos emigrados a Suiza,en cuanto pueden,regresan,no ven ese paraiso del que habla Ulpiano.El arraigo es nulo,alguna vez, de la segunda o tercera generación,aparece algún concejal con apellido hispano,que la prensa gallega airea.Le emigración está prácticamente cerrada.Un emigrante tiene casi imposible abrir un negocio.La sanidad pública en la práctica no existe.Solo hay que ver Españoles por el mundo y se vé lo que vale una consulta médica.Mi hermano por los años 80,ganaba 4.000 francos mensuales,operario cualificado,estudió en el instituto de Corias,claro que tenía que trabajar 16 horas diarias de lunes a sábado.Las compra la hacía cruzando la frontera con Alemania,más barata.
Estos días he leido que una botella de albariño cuesta en algún lugar de Suiza 35 euros.Mi consuegro,con sus dos hijos nacidos en Suiza y por lo que dice,
con buen salario,abandonó el paraiso suizo y está feliz en La Coruña,igual que mi hermano, en Asturias.
Claro que tampoco debemos olvidar,moralmente,de donde proceden los dineros depositados en los bancos suizos....dictadores,dictadores sanguinarios,narcotraficantes y toda clase de delicuentes,políticos corructos,blanqueos de dineros y toda clase de argucias.Lo de Bárcenas,solo es un grano, en un granero.
La historia de la transparencia bancaria suiza,no deja de ser literatura....Nos iremos al cementerio y ese paraiso fiscal y otros muchos...seguirán presentes.
Como anécdota puedo decir,que aquí en La Coruña entran al año unos 150 cruceros....todos están abanderados en paraisos fiscales y son bien recibidos en cualquier puerto que atraquen.
Claro que no es oro todo lo que reluce en esos paises. En algunos aspectos nos sacan mucha ventaja pero, no es menos cierto, que existen otros valores, no precisamente económicos, que ya quisieran tenerlos como en España.
Tengo familia en EEUU, en Australia, en Inglaterra y en Noruega; en ninguno de éstos existe el arraigo familiar que tenemos aquí. Los hijos se casan, se van y ahí te quedas. Muy pocas veces se reunen, en familia, como en España. Pero lo más triste de esto es que ya lo estamos copiando, tacita a tacita.
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