viernes, 12 de diciembre de 2014
OPINIÓN
Sabido es por todo aquel que se implica
cuán grato es opinar y hallarse cierto,
sin embargo, hasta un docto o un despierto,
errar puede, tal vez, cuando se explica.
Con humor su entrada narra el gran experto,
mas niega al que ambiciona, y lo critica,
y si es dispar social, lo justifica,
sumando comentarios de concierto.
No estamos defendiendo al arribista
tampoco al que cabalga en presumido,
mas sí al honesto que se alza en la lista.
Es aspiración de todo bien nacido
nivelar al de arriba por conquista
y aplaudirle el haberlo conseguido.
Mi empeño fue hacerlo muy seguido
y aunque leo medidas de soneto,
sólo atisbo un impreciso boceto.
cuán grato es opinar y hallarse cierto,
sin embargo, hasta un docto o un despierto,
errar puede, tal vez, cuando se explica.
Con humor su entrada narra el gran experto,
mas niega al que ambiciona, y lo critica,
y si es dispar social, lo justifica,
sumando comentarios de concierto.
No estamos defendiendo al arribista
tampoco al que cabalga en presumido,
mas sí al honesto que se alza en la lista.
Es aspiración de todo bien nacido
nivelar al de arriba por conquista
y aplaudirle el haberlo conseguido.
Mi empeño fue hacerlo muy seguido
y aunque leo medidas de soneto,
sólo atisbo un impreciso boceto.
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2 comentarios:
Se reta Jose´Manuel de Rañeces
a escribir sin demora algún soneto.
Yo acepto sin saber donde me meto
pues el reto me supera con creces.
Si incierto es contar en el agua peces,
conciliar sílabas en el cuarteto,
difícil es, pero tiene un secreto,
el de equivocarse la mar de veces.
Cincuenta años ha quién iba a decir
que ese tiempo era como una semana,
y que el reencuentro era volver a escribir.
Internet, esa chismosa ventana,
nos permitió ya más gustos compartir,
fue en Valdevimbre feliz la mañana.
José Manuel, he querido imitarte, tú siempre te lanzas y empujas, y también me lancé a la piscina. Con las prisas no miré si había agua y si faltaban o sobraban esas siempre esquivas sílabas. Continuaremos intentándolo.
Un abrazo.
¡Oh cielos, Leoncio!, como diría el oso Yogi a su compañero Bubu de paseo, en busca de alguna cesta “descuidada”, por Yellowstone. Esto parece una fábrica de sueños y cultura: Sonetos por doquier.
— Prometo —decía Yogi al atento vigilante, agente Smith,— prometo, decía, no leer cosa alguna sin antes haber pasado por el Blog de A. de Corias.
Bastó encender la mecha: Los barrenos ya estaban hechos y asaz la carga explosiva.
Salud!
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