Texto y fotos: jrFRANCOS
El pasado 13 de mayo Bruce Springsteen
actuó en Sevilla. Un amigo mío que asistió al concierto volvió impresionado:
"Durante más de tres horas, canción tras canción, sin parar.
Impresionante. Por algo le dicen The Boss, "el Jefe" al que
nadie le hace sombra", me comentaba.
Cuarenta y ocho horas después, un grupo,
que lleva varios lustros sobre los escenarios, lo hacía durante casi dos horas
y media, canción tras canción, sin parar, en la Romería de San Isidro -esa
ciudad de quita y pon, que durante sábado, domingo, lunes y martes congregó a
más de doscientas casetas y miles de personas santeñas y venidas de afuera-. No
pretendemos establecer comparaciones, sólo poner en valor el mérito de unos
músicos, con mucha cuerda -y no sólo las de sus guitarras-, que son capaces de
salir airosos de un concierto de esas dimensiones desatando una tormenta de
entusiasmo y plauso entre el público.
FICHA
NOMBRE: Tormenta Marismeña
MODALIDAD: grupo rociero de sevillanas y
rumbas (y algo de fandangos)
AÑO DE FORMACIÓN: llevan más de 20 años actuando
INSTRUMENTOS: guitarras (y a veces cajas)
Nº DE COMPONENTES: 4 (2 a la guitarra, los
otros 2 con palmas y los 4 a las voces)
REPERTORIO: unas cien canciones, que
dan para más de dos hora de concierto y sin agotarlas
NOMBRES DE LOS COMPONENTES: Enrique, Antonio y
Nino (de Los Santos de Maimona) y Luis (de Burguillos
del Cerro).
EDADES : pasan todos de los cuarenta
PROFESIÓN: albañil, mozos de almacén y policía nacional
FORMACIÓN ACADÉMICA: Estudios primarios
FORMACIÓN ARTÍSTICA: Son autodidactas, a base
de muchas horas de escucha y ensayo (al respecto, Antonio, guitarrista,
uno de los interlocutores, me enseña el callo que tiene en las yemas de los
dedos).
ACTUACIONES: En Madrid (en una sala rociera),
en Alcalá de Henares por dos veces (sala Espadaña), en
Alicante, varias veces en Badajoz capital y también por todo en
contorno, destacando la inauguración de la Peña Cultural
Flamenca Solera en la vecina Villafranca de los Barros con el
guitarrista José Luis Postigo y el cantaor José de la Tomasa.
También han compartido
escenario con María de la
Colina, Amigos de Gines, Los Marismeños y otras figuras
de la canción.
Tormenta Marismeña es un grupo
elástico, donde pueden actuar los cuatro, al completo, tres e incluso a
veces dos solamente, según circunstancias y cachet a repartir (2). En
algún momento de su dilatada trayectoria valoró la posibilidad de tener
representante, darse de alta como autónomos -requisito imprescindible para ser
representados- y lanzarse al incierto camino de las discográficas y la
actuación como profesionales, lo que implicaría renunciar a la seguridad de sus
trabajos actuales. En estos momentos esa es una posibilidad cada vez más
lejana, máxime teniendo en cuenta el agotamiento de toda una vida en el mundo
de la música que llevan algunos de sus miembros, que ya estuvieron en aquella
otra formación llamada Trío Guadiana. (Al respecto me comentan que
durante un tiempo coexistieron los dos grupos, dándose la circunstancia de ser
contratados para sendas actuaciones un mismo día, teniendo que partirse y tirar
de refuerzos para cumplir con los dos compromisos "que no era cosa de
dejar pasar", rematan).
Lo que sí podría estar más cerca es la
incorporación de un órgano musical, algo que miran de reojo los puristas,
pero que abre nuevos horizontes y enriquece el sonido con sus cajas de ritmos y
batería, abriendo vías innovadoras a su arte.
NOTAS.-La fotografía del collage la realicé yo pero
con las que me facilitaron ellos, tomadas durante una de sus
actuaciones en Badajoz (si os fijáis, en el decorado del fondo aparece en
algunas la Torre
de Espantaperros, de la que un día nos hablara aquí Alfredo Fernández).
La nota 2 la pongo porque algo similar me contó en una
ocasión Gión respecto a aquellas tan conocidas orquestas gallegas como Los
Satélites o Los Trovadores, que por aquellas fechas cobraban ya un millón
de pesetas (de esa cantidad se habló en una de las Fiestas de San Roque en
Tineo), cantidad muy considerable para la época, pero como eran muchos a
repartir, "pues los gallegos, que son muy listos -decía Gión-, parcelaron
e hicieron formaciones más pequeñas, algunas de las cuales, como Los
Tamara, tuvieron eco discográfico y seguían cobrando el millón pero a
repartir entre cuatro".
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