ENCUENTRO ANUAL CORIAS 2023

Con un sol radiante y una temperatura un tanto atípica, por lo elevada para un 30 de septiembre, los antiguos alumnos de Corias, puntuales como clavos y de acuerdo con el horario fijado, fuimos llegando a la explanada de la iglesia de nuestro querido Convento de Corias. Allí nos encontramos con los frailes dominicos: padre Basilio, padre Lastra y padre Patxi. Entre antiguos alumnos, familiares y algunos amigos, nos juntamos sesenta y tantos asistentes. Cifra a tener muy en cuenta, ya que, cada año las mermas de exalumnos, por ley de natural, son palpables. Con la novedad de que este año asistieron un grupo de los alumnos fundadores del instituto laboral, del año 1957 y que sólo lo suelen hacer en determinados años. La misa fue concelebrada por el padre Basilio con la ayuda de Lastra. Al finalizar la celebración el oficiante, junto con la bendición final, nos hizo una advertencia para el próximo encuentro, y que consiste en dotarnos a todos de un cuadernillo de seguimiento de la misa para que las contestaciones por nuestra parte sean más participativas, más audibles y más firmes. Observación muy oportuna y que la mayoría de los asistentes estamos de acuerdo. De todas formas, el padre Basilio es comprensivo y sabe disculparnos por nuestros titubeos en el seguimiento y participación de ciertos actos religiosos, que en otros tiempos los sabíamos de memoria, ya que fueron de práctica diaria, y hoy, llevados por la vorágine de la vida, ya no lo son tanto. Acabada la misa y una vez tomada la foto de familia, en la que nuestros familiares hacen de reporteros gráficos, surgieron los corrillos de todos los años en la misma iglesia y poco a poco fuimos abandonando el majestuoso templo. Algunos se fueron a visitar el antiguo Taller de Madera, hoy cafetería del parador, y otros nos fuimos encaminando hacia el Restaurante Peñagrande, situado a la salida de Cangas con dirección a Leitariegos, donde se celebró el almuerzo. Este año dada la veraniega temperatura exterior reinante tomamos los pinchos fuera, en la terraza, bajo la sombra de una hermosa glicinia. Se degustaron vinos blancos muy apetitosos, de variedad Albarín y D.O Cangas, y un surtido de aperitivos variados. Pasadas las dos y media de la tarde subimos al comedor para degustar el menú como el del año pasado: potaje de berzas con compango y escalopines de ternera, acompañado de vino tinto Rioja, helado, café y chupito espirituoso. Llegado el turno de preguntas durante la asamblea, se pidieron explicaciones a nuestro presidente de la asociación sobre, a qué es debido que esta celebración no se pueda realizar, ya por segundo año, en las dependencias del parador. A lo que se respondió que no gustó el olvido de la fecha por parte del parador el año pasado y que este no se solicitó. No obstante, se pondrán en contacto con la dirección para intentar solucionar este fallo para el año venidero. También hubo petición de cambiar el potaje o caldo de berzas por sopa de pescado, pero me da que esta propuesta no va a prosperar pues, la mayoría de los comensales, entre los que me incluyo, el potaje de berzas nos encanta y algunos, como es el caso del padre Basilio, que vive en otra región fuera de Asturias, en Caleruega, solamente lo degusta en esta ocasión y pocas veces más. Por lo tanto, pienso que tendremos caldo de berzas “forever”. El menú en general muy bien y la estancia también. Así pues, no me queda otra cosa que desear salud y alegría para todos y nos vemos en el próximo 2024. B. G. G. Bloguero “Prior”