Chorizo al periódico.Publicado en El Piñolo hace algunos años.
Ingredientes: 1 chorizo de los de Corias cosecha años 60; 1 hoja de periódico; 1 bollo de pan o chusco.
Accesorios: 1 navaja; 1 encendedor o cerillas; 1 palo o alambre aguzado de 20 cm aproximadamente; 1 lata de conserva vacía.
Preparación:
1.- Estudiar cuidadosamente el chorizo para determinar la parte mas grasa del mismo. Reservar prestando atención a que en los alrededores no existan otros objetos de textura y tamaño similar que pudiesen inducirnos a error o confusión con el chorizo.
2.- Doblar dos veces sobre si misma la hoja de periódico.Si se dispone de mas de una hoja, desechar la más externa porque suele estar muy manoseada y, ante todo, la higiene.
3.- Tomar el chorizo con la parte más grasa hacia abajo y envolverlo en el periódico cerrando los extremos mediante la torsión del sobrante de papel en sentidos contrarios (como un caramelo).
4.- Ensartar el chorizo en el palo o alambre a una altura aproximada de 1/3 de su longitud por su parte superior. De no seguir esta instrucción el chorizo procedería a darse la vuelta con lo que la eliminación de la grasa se vería perjudicada. Comprobar que el chorizo queda bien sujeto para evitar un posterior desprendimiento durante el tratamiento térmico lo que arruinaría el plato.
5.- Si la preparación se efectúa en interior (indoor), disponer de la lata vacía en lugar plano y de fácil acceso. Si es en el exterior utlizar la lata para cavar un pequeño hoyo para enterrar posteriormente los residuos.
6.- Abrir el bollo en dos mitades y disponerlo en lugar bien visible y de pronta y fácil recuperación. Es muy importante éste paso pues casos se tienen dado de la desaparición del mismo haciendo inútil la preparación del plato.
7.- Tomar el chorizo ensartado con la mano izquierda (si se es zurdo con la derecha) y situarse en la perpendicular del hoyo o lata. Con la mano derecha (la izquierda si se es zurdo) encender la parte inferior del envoltorio. A partir de éste momento debe de mantenerse en todo momento la verticalidad del chorizo.
8.- Transcurridos unos segundos fluirá la grasa por la parte inferior del envoltorio. Si esto no sucediese es que el chorizo es de buena calidad con lo que deberá de procederse a apagar el fuego y prepàrar el bocadillo con los metodos tradicionales. (A mi nunca me ocurrió tal).
9.- El chorizo estará en su punto cuando ocurra alguno de los casos siguientes:
a.- Cuando se observe una notable disminución de la cadencia del goteo de la grasa en la lata u hoyo (es cuestión de oido).
b.- Cuando se observe un cambio en la coloración del humo acompañada de un olor característico (tufo). Es muy importante este segundo supuesto pues casos se han dado en que el goteo de la grasa en la lata ha permanecido constante hasta la total desaparición del periódico, del chorizo y hasta del palo.
10.- Una vez el chorizo en su punto proceder, mediante enérgicos resoplidos, a apagar el fuego y a la cuidadosa eliminación de los restos de periódico tanto quemados como sin quemar que pudiesen quedar adheridos al chorizo. Es normal que el tamaño del chorizo haya decrecido hasta en un 75%.
11.- Abrir el chorizo a la mitad de forma longitudinal y depositarlo en el bollo anteriormente preparado.
12.- Consumir de inmediato.
FELIPE.
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9 comentarios:
La receta es apetitosa, sobre todo teniendo en cuenta la edad de los consumidores en el momento de publicarlo en el Piñolo. De todas maneras, casi le viene a uno el olor a chorizo asado, -que es muy agradable- y aunque luego el estómago proteste un poco igual se puede hacer un esfuerzo. Tiene un inconveniente y es que se tarda más en leerla completa que en comer el chorizo.
Minuciosa descripción, sí señor. Ni que la hubiese hecho Arzak o Arguiñano. Ahora bien, el autor de esta receta me va a permitir aconsejarle que estaría mucho mejor y más aséptica, si en vez de utilizar como envoltorio papel de periódico, se utilizase papel de estraza del de envolver de toda la vida. Hay que tener en cuenta que este papel aparte de ser mucho más grueso y absorbente no está impregnado de tinta como el otro. Tinta que absorberá por completo el chorizo y que puede ser perjudicial para la salud del comensal. Además, si el chorizo va a ser chamuscado hasta sudar la gota gorda, buena gana de preocuparse por las noticias del periódico, ya sean éstas buenas o pésimas. Yo pienso que al churruscado, ni le van ni le vienen ¡Buena gana de preocuparse!
Galan: como bien sabes, en Corias; que yo recuerde, no abundaba el papel de estraza y si lo hacía el papel de periódico o similar que era lo que se utlizaba normalmente. De acuerdo con la toxicidad de la tinta pero como tampoco era mucha la frecuencia de la ingesta el resultado es que, al menos que se conozca, nadie resultó intoxicado por la misma.
Y, hablando de papeles y aunque no sea quizás el comentario más apropiado a la entrada: ¿ alguien recuerda si en el convento exixtía el papel higiénico?.
Felipe.
Felipe, claro que había papel higiénico y de la marca propia de entonces: “El Elefante; aquel de color un tanto oscuro por ser de origen reciclado y que si lo cogías por el canto cortaba como un bisturí. Si no hubiéramos dispuesto de aquella utilidad higiénica nos veríamos obligados a tener que entrar a los servicios con una jofaina llena de agua cada uno, como hacen los musulmanes. Eso, o ir a evacuar a orillas del Narcea.
1º) La receta muy buena, lo que me parece que la mayoría de los participantes se conformaban con el holor. No abundaban los chorizos, salvo en algunas maletas donde sus propietarios los tenían como oro en paño.
2º) ¿Papel higiénico?. De periódico y no siempre. No recuerdo ver ningún rollo en los servicios de las clases. Solía haberlos en los de las camarillas y no siempre. Lo que si recuerdo es que cada uno llevaba, en el bolsillo, un utensilio para poder cerrar la puerta, por dentro, ya que habían desaparecido todos los cerrojos. Creo que ninguno, de aquellos recintos, pasaría la inspección de sanidad.
Samuel: totalmente de acuerdo. Lo más utilizado era el papel de periódico. Y, en cuanto a la higiene de los servicios..., para que vamos a contar. En cualquier caso se podrian considerar limpios si los comparase con los que sufrí en el CIR de San Climet Sasebas en Gerona muchos años depués. Y es que, cuando formamos "masa" nos volvemos muy guarros.
Yo como era interno no tengo constancia sobre el tema del papel Higiénico. El Prior apunta que era el Elefante. ¡Claro era el único que existía en aquella época!
Felipe, al menos en el CIR teníais servicios. Nosotros en el Ferral, en la zona donde yo estuve ¡Ni los había! Bueno estaban a más de 500 metros. ¡Como para salir por la noche en noviembre, a -6ºC!
Ahora saldrá el chaval de Oviedo, ese que va a la Biblioteca y nos dirá que en el 5º Batallón donde él vivía como un Marajá, sí los había. Como que se trataba de una zona recién construida y sin literas.
Samuel hace poco tiempo comentaba que nadie se había dado cuenta de que en un párrafo escrito por él sobraba una "H". ¿Se trataba de un acertijo? Porque en su comentario, (1º) nos coloca un HOLOR así de grande que me escama en una persona tan docta en el manejo de la Podadera.
Tienes razón Alfredo; ya tengo dos hs en el haber. Era para dar a entender que el olor era muy fuerte. ¿Vale?.
A mi también me tocaron las naves-barracones del Ferral. ¿Servicios?.
Los más cercanos a 200m..
Alfredo el barracón que yo ocupaba en El Ferral, era 22Cía, 5ºBon y no era nuevo; todo lo contrario. Piso de tierra, literas de la 1ª guerra mundial y los servicios, donde las duchas, a unos 200 metros.
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