Texto y fotos: jrFRANCOS
El pasado
verano subí un día al desván de mi casa natal o "parreiro",
donde en tiempos se almacenaba el heno -ahora se ensila o hacen pacas y
rollos directamente en el prado, que van a la nave- y entre un montón de
trastos, desde la silla de montar de mi padre, unas polainas, el aparato de
radio que hubo en tiempos en la casa y que he rescatado -dándoselo a un
restaurador y metiéndole dentro un transistor para que "funcione"-,
una máquina metálica de sulfatar y varios cosas más, pues entre todo eso había
un baúl, viejo y cubierto de polvo y telarañas, donde en tiempos yo había
guardado cosas de mis años en Corias.
Cuando lo
abrí, con la expectación de quien vuelve a un lugar casi cincuenta años después
-pues yo recordaba algunas cosas de su contenido, pero no todas-, me encontré
de todo: libros -de los que en la entrada aquella "El ideario educativo de
Corias", hecho junto con Galán y Ulpiano ya di cuenta fotográfica aquí de
ellos-, láminas de dibujo, libretas con ejercicios y apuntes, un diploma con
matrículas de honor, un estoque que yo había hecho en el taller de metal a
partir de una "muleta" metálica que había en mi casa y que cuando se
desenfundaba era una espada, muleta a la que le corté la curva, le hice una
empuñadura redonda en el torno y le acoplé la cruz pareciendo un estoque de
verdad; el manuscrito de una novela titulada "SAM-SAM" (Sabor Amargo
Morir-Sabor Amargo Maldecir, que ambienté en la Cuenca Minera y
durante la Revolución
de Octubre de 1934), un libro de cuentos de Miguel Strogoff y una manta
de las que usaba en Corias. Estaba intacta, sin polilla ni rotos, y con
el número que a mí me habían asignado marcado el rojo: el 69. Sonreí.
El 69 es un
número talismán del sexo oral mutuo, practicado de modo simultáneo (felación y
cunnilingus). Es una variante del Kama
Sutra y suele tomarse como
juego preliminar a la cópula. En el caso de parejas heterosexuales aquí se
invierte la postura del misionero,
ya que la mujer debe estar arriba.
El haber
tomado una cantidad matemática para denominar tal práctica, no significa que,
como le sucedía a aquel, que decía, " yo dos seguidos ahora no, pero
cuando era joven sí, muchas veces; pero sesenta y nueve..., carajo, eso
nunca", sino que se debe a que los números 6 y 9 tienen la misma grafía si
se gira uno de ellos 180º. Originariamente se le denominaba "postura del 6
y del 9", hasta que alguien, por una cuestión de economía lingüística, lo
dejó como lo conocemos en la actualidad.
La postura
no es un invento de tiempos modernos, de desarriendo y sin moral, como a veces
se puede creer. Si la prostitución "es el oficio más antiguo del
mundo", como suele decirse, todo lo que rodea al sexo lleva años y siglos
inventado ya, como una cuestión inherente al ser humano y que es además
de enorme trascendencia, tanta que gracias a ella se perpetúa la especie en el
tiempo, por no hablar de la otra (fuente de sensaciones y satisfacciones). Sin
remontarnos excesivamente en el tiempo, el pintor y grabador belga Félicien
Rops realizó un grabado en 1865 para Le Diable au Corps, donde con
su técnica "retrata" a una pareja practicándola. Y si queremos irnos
más atrás, en algunas estancias de romanos pudientes aparecen pinturas al
fresco con ese y otros motivos. Tanto los grabados como esas pinturas
debían ser la foto fija de la película pornográfica que sus dueños tenían para
entrar en situación ante sus actos amatorios.
(De Félicien Rops,
1833-1898, decir que colaboró con el escritor Baudelaire y que los temas de sus
obras giraban en torno al sexo, la muerte y las imágenes satánicas).
Cuando un día le cuento a un amigo lo del baúl, como os
lo estoy contando a vosotros, me dice el muy ladino:
-Y, con esa asignación numérica por parte de los frailes, ¿qué tal? ¿Fue
premonitoria?
Lo entendí perfectamente, pero me hice el tonto:
-¿Cómo?
-Que si tú, viniendo señalado con el 69 desde que eras un niño... ¿cómo
lo llevas?
A lo que sacando pecho contesto:
-Casi, casi tan bien como tú. Pero no hablaré si no es en presencia de
las cámaras de Tele5, que pagan, o de mi sexóloga.
8 comentarios:
Qué casualidad, hombre! Estos días en casa en Posada recogiendo las cosas de mi padre, apareció una toalla de baño mía de los años de Corias y en perfecto estado a pesar de los 52 años de existencia que tiene, pero no de uso. La duradera y persistente toalla lleva bordado el nº 63. Y al leer tu entrada he dicho: vaya suerte que tuve cuando me asignaron el número para la ropa en el internado de los PP. Dominicos. Mira que si por poco llegan a darme el de Francos, ¡qué vergüenza! cuando el fraile vigilante de las duchas gritara en público: a ver, el del 69 que pase por la higiene. Momentos de suerte que tiene uno en la vida. Aunque bien mirado, en aquellos tiempos para nosotros el 69, era un cifra anodina como otra cualquiera, sin pizca de picardía ¿o no?
Aunque, probablemente, para Luis Sánchez Miyares y algunos otros de ciudad, más avanzados en gramática parda, no fuera tan anodina.
Vaya lio que os estais armando con la numeracion,no voy a entrar en ello,pues es bastante explicito Francos y a estas alturas de la vida,ya nos sabemos toda la tabla númerica.Veo que hoy fué el dia de la madre,(bueno ese dia tiene que ser todos los dias)quiero decir comercialmente, os voy a poner una lectura, sobre la madre, en homenaje a todas las madres vuestras ,las que vivan y las que ya no estan, siempre es bueno llevarlas en el recuerdo y dedicado a Olga y a mi, que somos las que por aqui andamos.CUANDO DIOS CREÓ A LA MADRE.Un dia, Dios decidio crear....la Madre.Llevaba dándole vueltas al proyecto durante mas de una semana, cuando aparece un Angel y le suelta:Anda que el modelito te esta haciendo perder el tiempo ¿eh? es cierto. Pero ¿has leido los requisitos de fabricación? Debe de ser lavable , transparente, pero no de plastico, tener 180 piezas móviles, todas recambiables; un corazon de oro, tierno a la vez, la cabeza en su sitio y unos labios capaces de dar un beso que lo cure todo... desde una herida en la rodilla... hasta un desengaño amoroso... y ademas, seis pares de manos....¿Seis pares?.Si por las tareas que le aguardan.Pero lo dificil no son las manos , dijo Dios,sino los tres pares de ojos que la madre debe tener.¿Tantos? Dios asintio. Un par para ver detrás de la puerta cerrada cuando pregunta.¿Que estais armando ahi dentro hijitos? aunque ya lo sepa. Otro por detras de la cabeza para ver lo que no queria ver, pero que una madre no debe ignorar. Y otro par, ademas,para decir en silencio al hijo que se ha metido en un lio:"Te comprendo, hijo. A pesar de todo te sigo queriendo" Señor dijo el Angel echándole gentilmente un brazo por los hombros, vamos a descansar ... Mañana sera otro dia.... No puedo respondio el Señor, casi esta acabado. He fabricado un modelo que se cura sola, si cae enferma, que sabe preparar una comida para seis con solo medio kilo de carne picada y que es capaz de mantener quieto bajo la ducha a un chaval de 4 años. El Angel dio una vuelta lenta en torno al modelo de madre, contemplandola con curiosidad.La encuentro demasiado delicada, dijo luego , chasqueando la lengua contra el paladar.!Pero resistente! replico el Señor con aplomo.Tu no tienes ni idea lo que es capaz de soportar una madre. Pero ¿sera capaz de pensar?.La ofendes y me ofendes por dudarlo.No solo tendra inteligencia, sino que sabra hacer un uso estupendo de la misma y cargar su razon de razones que acaban por convencerte.Entonces el Angel se acérco al modelo de madre y le paso un dedo por la mejilla. !Hay una averia, una fuga!.Pierde algo....No hay tal fuga corrigio el Señor.Se trata de una lagrima.Y eso ¿para que sirve?.Sirve para expresar alegria , tristeza, desengaño, dolor ,soledad e incluso, orgullo por el hijo que tiene éxito.!Estas echo un genio! exclamó el Angel.Con una pizca de melancolia y de humor añadio Dios por lo bajo:Si te soy sincero, yo no he sido quien ha inventado las lagrimas. Pero estan bien(.Su autora ERMA BOMBECK) ¿No os parece precioso, pues mira este escrito, acompañadode un gran ramo de flores, me lo regalaron los Dominicos un año que coincidio, que estaba en Valladolid tal dia com hoy,dijeron que era como la representante de las madres de todos ese dia, creo que hasta me emocioné y todo.Sajudos
Pues yo creo que ya os expliqué en otra ocasión lo que pasara con el mio: Tenía asignado el 66, y asi llevaba la ropa marcada de mi casa. El caso es que un "flairón" lo vio y resulta queq el seis también está asignado al diablo. En la literatura, cine, etc. podéis ver su relación con el 666. Entonces me hizo de cambiarlos todos por el 55. Y alli, con una tijerina de las que vendían en la "tiendina", me puse a quitarles el trocito o puntada que une los extremos del número, para que quedase el 5.
Me gusta mucho la entrada de Mamen. Es cierto que un dia así no podía quedar sin esas alusiones.
Ah! Y de lo otro, ¿qué me vais a decir...? Sabréis que (como decía Bond, James Bond), yo también soy cinturón negro de kamasutra!!
Mamen, muy bonita la lectura que has puesto sobre la madre. Todo lo que se diga a favor de esta emblemática figura es poco. Yo creo que todos los seres vivos sentimos por nuestras madres una admiración que raya casi en la adoración y bien merecido que lo tienen. Aparte de habernos traído al mundo y colmarnos de cariño y ternura durante toda nuestra vida, también debemos tener presente que ellas nunca escatimaron esfuerzos ni desvelos para lograr nuestro bienestar. Estos sufridos y abnegados seres siempre anteponen a los hijos para todas las cosas, bien sea en comida, descanso, tranquilidad, etc., posponiéndose ellas para el último lugar. Yo de vez en cuando recuerdo ciertos momentos de la infancia en los que uno tenía miedo a algo, a cualquier tontería, pero que nos causaba gran preocupación y solo con llegar la madre a nuestro lado y decirnos unas palabras de aliento y consuelo ya quedaba uno totalmente reconfortado y tranquilo como si fuera un ser mágico. Nos sentíamos como si tuviéramos a nuestro lado a la persona más poderosa de la tierra. Se nos quitaba el miedo al instante. Aquellas palabras pronunciadas por la madre eran como un bálsamo para uno. No digamos nada de los mimos y cariño que nos dieron a todas horas y en especial cuando estábamos enfermos o simplemente para que nos quedáramos dormidos. Las madres como tal, son una maravilla.
Como homenaje a la figura de la madre, ya que el pasado domingo fue su día, voy a transcribir lo que decía la hoja del Taco, El Mensajero, el día 4 de mayo de 2012.
AMOR DE MADRE
Un artículo de National Geographic mostraba hace unos años una foto impactante de las “alas de Dios”.
Después de un incendio forestal en el parque nacional de Yellowstone, los guardabosques iniciaron una larga jornada, montaña arriba, para valorar los daños del incendio.
Un guardabosque encontró un pájaro petrificado en cenizas, literalmente, posado cual estatua en la base de un árbol. Un poco asombrado por el espeluznante espectáculo, dio unos golpecillos al pájaro con una vara. Cuando lo hizo, tres diminutos polluelos salieron de debajo de las alas de su madre, ya muerta.
La amorosa madre, en su afán de de impedir el desastre, había llevado a sus hijos a la base del árbol y los había acurrucado bajo sus alas, sabiendo instintivamente que el humo tóxico ascendería.
Ella podía haber volado para encontrar su seguridad, pero se había negado a abandonar a sus crías. Cuando las llamas llegaron y quemaron su pequeño cuerpo, ella permaneció firme porque había decidido morir para que aquellos que estaban bajo sus alas pudieran vivir.
Estupendo y tierno relato Mamen. Lástima que una ya no la tenga para mimarla y devolverle solo un poco de aquello que recibimos de ella.
Realmente, Dios sí sabia lo que hacía cuando creó a la MADRE.
lo del taco que comentas Benjamin, tambien me llamo la atencion al leerlo,y ahi queda reflejado,el amor de la madre a sus hijos,debio de ser una escena tan peculiar que alguien que la vió tuvo que transcribirla, .para dejar constancia de ello.
Como imagen visual que resume lo que es una madre está lo que se podría llamar "la Piedad de África", fotografía de Samuel Aranda, publicada en el "The New York Times" y que fue la ganadora del primer premio World Press Photo 2011, donde Fátima, con un velo negro que la oculta por completo, sostiene en brazos a su hijo Zayed, de 18 años, con el torso desnudo, que sufría los efectos del gas lacrimógeno empleados por las fuerzas yemeníes para disolver una manifestación de protesta contra el régimen autoritario del entonces presidente Alí Abdalá en la capital Sanaá.
La foto dio la vuelta al mundo.
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